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En este libro de ideas queremos mostrarles lo fácil que resulta crear la ilusión de tener un bosque dentro de casa.
Y ya que hablamos de integrar interiores con exteriores, este otro libro de ideas con 7 consejos para diseñar una terraza espectacular.
Atención amantes de la naturaleza, esta nota es para ustedes. Y es que nada más lindo que poder traer un poco de vegetación y verde dentro de casa para purificar los ambientes y hacernos sentir más vivos.
Crear la ilusión de que tenemos un bosque dentro de casa o de que nuestra casa forma parte del bosque, da igual, es mucho más fácil de lo que imaginamos. Otra ventaja es que no necesitamos gastar cantidades exorbitantes de dinero. Solamente hace falta imaginación, ganas y un poco de ayuda de un jardinero para que nos ayude en la selección de las plantas que mejor funcionarán en nuestra casa.
Tengamos en cuenta antes de empezar unas cuantas variables, para evitar comprar plantas que no van a prosperar en casa, lo cual sería muy triste. En nuestro país debido a la diferencia de clima que varía con cada estación, existen épocas idóneas para plantar cada una. También tenemos que tomar en cuenta la ventilación y algo aún más importante: la luz natural que se cuela en el espacio donde queremos armar nuestro bosque en miniatura. También tendríamos que ser muy sinceros y preguntarnos si tenemos el tiempo y la disposición de darle a nuestras plantas los cuidados que necesitan.
Ahondando en este último punto, puede que inicialmente no creamos que tendremos el tiempo suficiente para ocuparnos de nuestro bosquecito, pero aún así, la recomendación es que se arriesguen con una o dos plantas y vean si no terminan aficionándose a la jardinería, ya que existen pocos hobbies más relajantes y satisfactorios. Seguramente esos momentos que pasemos ocupándonos de nuestras plantas serán una pausa que agradeceremos en medio de nuestras apretadas agendas.
Lo primero que debemos hacer, especialmente si estamos en la fase de construcción de nuestra casa, es elegir ventanales y puertas de cristal que dejen entrar todo el verde y la frescura del jardín. Si ya pasamos esa etapa agrandar las ventanas y cambiar las puertas que dan al exterior será una decisión de la que jamás nos arrepentiremos. También podemos recrear una suerte de invernadero dentro casa, manteniendo un clima cálido y armarnos una pequeña jungla tropical con plantas provenientes de lugares más calientes. Usar madera de ciprés para los muebles, pisos y paredes del área en la que queremos recrear el bosque contribuye a darle una cualidad más orgánica al conjunto. Añadir agua en forma de pequeños estanques o cascadas y plantas acuáticas produce un gran efecto también. Los pinos son ideales por ese olor tan especial que nos transporta inmediatamente a los bosques de nuestra infancia y las plantas trepadoras contribuyen a darle el acabado final.
La madera de ciprés o de pino combinada con plantas y usada en el piso, paredes o en muebles nos mantiene dentro del tema boscoso que nos estamos esforzando por replicar.
Podemos apreciar en la foto cómo la madera se complementa perfectamente con la vegetación y se traduce en un espacio orgánico, natural y muy verde. Un verdadero oasis dentro de casa.
Pocas cosas resultan más atractivas que los grandes ventanales y puertas de vidrio que dejan entrar la luz del sol a raudales, nos regalan con lindas vistas y nos hacen sentir que la naturaleza está al alcance de nuestras manos.
Una sola foto no le hace justicia a la casa diseñada por el raquitecto Alejandro Sticotti, no dejen de visitar su perfil, ya que todo el conjunto ilustra de forma magistral este punto. La exuberante vegetación que se aprecia desde todos los ambientes nos transporta mágicamente al bosque que soñamos.
Independientemente de la estación, dentro de casa los ambientes tienden a ser más cálidos debido a la calefacción. Podemos aprovecharnos de eso llenandola de plantas tropicales.
Estas plantas suelen tener unos colores muy vivos y alegres, que nos levantarán el espíritu especialmente durante esos días otoñales e invernales en los que el sol se vuelve bastante esquivo. También nos transmitirán esa sensación de vacaciones que asociamos con la playa o el calor.
Un pequeño estanque o cascada dentro de casa da para mucho. No sólo por lo calmante que es el ruido del agua, sino porque podemos llenarlo de plantas acuáticas como nenúfares y, si no tenemos gatos que puedan dedicarse a la pesca, de peces dorados.
El agua y la vegetación van de la mano e incorporar ambas dentro de casa enriquecerá todos los espacios adyacentes convirtiéndolos en ambientes mucho más atractivos.
Los bosques de los cuentos de hadas suelen tener profusión de pinos y abetos. Su olor es mágico y lo asociamos con la navidad. Existen muchísimas especies y combinarlas entre sí pueden terminar creando un conjunto estéticamente fascinante. Además, no pierden las hojas con la llegada del frío y esta ventaja no es poca cosa.
Se pueden adquirir a muy temprana edad y son lindísimos en cualquier etapa de su crecimiento. Podemos optar por bonsais o tratar de integrar los grandes, como en el caso de la imagen, a nuestra casa construyéndola alrededor de un pino ya crecido. Pueden hacer click acá para ver otra versión.
El toque final que le dará a nuestro bosque un acabado espectacular son las plantas trepadoras o hiedra. No sólo ayudan a ocultar muros y paredes, sino que visten cualquier espacio con sus distintos tonos de verde. Suelen crecer muy rápido y ganan mucho con el paso de las estaciones ya sea porque sus hojas se tiñen de bronce y colorado en otoño o porque se llenan de flores en primavera.
Esperamos que este libro de ideas les haya acercado un nuevo y divertido proyecto que enriquecerá su casa de muchas maneras.
