Existen elementos en nuestras casas que son tan indispensables y cotidianos
que pasamos por alto el potencial decorativo que pueden aportarle a nuestra fachada o a nuestros espacios. Tal es el caso de las puertas y para evitar que nuestros lectores cometan el error de subestimar el impacto que una puerta bien elegida puede tener en nuestro hogar.
Las puertas son elementos tremendamente versátiles, ya que las podemos encontrar en un sinfín de estilos, modernas, clásicas, rústicas, industriales, o en diferentes materiales, como madera, diferentes metales, polímeros y vidrio, y de diferentes colores y texturas.
Las puertas por su misma naturaleza, son umbrales de transición, que nos llevan de un espacio a otro. Es por ello a la hora de elegirlas, saber que deben armonizar con un pasillo y un dormitorio, por ejemplo, o con la entrada de nuestra casa y el interior, o con nuestras áreas sociales y la terraza, el balcón o el jardín. Especialmente cuando conectan recintos muy disímiles, como el dormitorio y el balcón, la elección debe ser más cuidadosa.
Con todo esto en mente, hemos reunido diferentes puertas, para espacios distintos de nuestra casa, que, esperamos, les sirvan de inspiración a nuestros lectores a la hora de elegir las suyas.
Las puertas de vidrio siempre son una acierto decorativo, ya que la belleza de este material es innegable. En esta casa, que se encuentra en una urbanización playera cerrada, se atrevieron a optar por una puerta principal transparente. ¡Deslumbrante!
Las puertas con molduras, especialmente en pasillos y dormitorios aportan una elegancia clásica a ambos espacios. Las preferimos laqueadas en blanco, para aportar mayor luminosidad.
Cuando el diseño arquitectónico acompaña a las puertas, se pueden crear resultados mágicos como el que vemos en la imagen. Un volumen geométrico en hormigón gris claro, enmarca las puertas de vidrio y hierro pintado de blanco.
Las puertas de metal pueden resultar un poco frías. Para contrarrestar esta sensación, nada mejor que pintarlas en un tono bien cálido, como este amarillo ocre.
En este espacio, dos puertas angostas abatibles se abren hacia la sala y el comedor, dejando casi escondida a la cocina, ya que son del mismo material que el bar y la decoración de la pared.
En este pasillo, se crea un efecto dramático que atrae las miradas hacia la puerta de vidrio del jardín, con una guía de luces que se acerca hasta ella.
En esta casa, el gran efecto lo crean todas las aberturas de hierro pintadas de negro, contra las blancas paredes y el vidrio de las puertas.
Ha sido y probablemente siempre será uno de los materiales más populares. La madera, especialmente en puertas, ventanas y revestimientos, se luce con esa cualidad cálida y acogedora.
Esta variedad de puertas corredizas se llaman así porque son corredizas y al abrirse quedan ocultas por una ranura en la pared creada para tal efecto. Son ideales para integrar espacios en un instante, dejando aberturas amplias y luminosas en su lugar.
El azul es un color que, en todas sus tonalidades, está de última. ¿A quién no le gusta al menos un matiz de azul? Elige tu color favorito y pinta todas tus puertas.
Esta puerta es una joya. El efecto que crea el volumen de hormigón proyectado hacia adelante, creando un pasillo semicerrado, junto con una iluminación imaginativa, es simplemente fantástico.
Esta puerta de madera pasa casi totalmente desapercibida en la columna de madera de esta casa. Si quieres lograr un aspecto aún más invisible, evita los picaportes y deja que se abra por hendiduras en el medio.
Las mejores para conectar espacios interiores con la terraza, el balcón o el jardín, ya que permiten una mejor vista del exterior, una entrada constante de luz natural, y la posibilidad de crear una dinámica relación entre el adentro y el afuera.
Las puertas para el baño no tienen que ser genéricas ni aburridas. Al contrario, son la oportunidad de darle a este espacio un toque divertido, ya sea con color o con una textura inesperada.
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